El pasado 23 de febrero, tras el fallido intento de ingresar la ayuda humanitaria para Venezuela, el presidente Nicolás Maduro rompió relaciones diplomáticas con Colombia y anunció el cierre de la frontera. Casi cuatro meses después, Maduro sorprendió en Twitter con el anuncio de la reapertura de los pasos.
Antes de la jornada del 23F, el Gobierno colombiano ordenó el cierre de la frontera como una medida de seguridad, pero levantó las restricciones de tránsito el 27 de febrero. Luego de esa fecha, la decisión de mantener cerrados los pasos regulares fue exclusiva del Palacio de Miraflores.
El cierre de la frontera no solo afectó a colombianos y venezolanos que diariamente cruzan de un país a otros para trabajar, estudiar y acceder a servicios de salud, sino que dejó a muchos migrantes que huyen de la crisis que vive Venezuela sin opciones para venir a Colombia regularmente. El paso por las trochas y pasos ilegales que abundan a lo largo de los más de 2.000 kilómetros de frontera representó un riesgo adicional a la ya difícil situación de los migrantes venezolanos que, según ACNUR, ya son más de 4 millones.
*Noticia en desarrollo
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela
