Desde hace más de cinco años entregan ayudas de ropa de invierno a los extranjeros que recién llegaron a Argentina y que no tienen los recursos para adquirir este tipo de ropa especial.
Por Carlos Iván Suárez – Periodista Te lo Cuento News
“Na guará, este frío es muy fuerte”, dice Migdalia Torres, una barquisimetana que tiene apenas poco más de un mes en Buenos Aires, lugar donde decidió migrar junto a su familia para “tomar aire de la crisis que se acentuó últimamente”, comentó.
Ella, al igual que muchos venezolanos, se encontraba en las afueras de la parroquia Caacupé, una especie de refugio espiritual de los migrantes en la capital argentina. Llegó a las 2:00 de la tarde, pues a esa hora estaba citada para recibir una ayuda de sábanas y ropa para afrontar el invierno que se avecina.
“Es muy necesario porque no estamos acostumbrados a estas temperaturas y de verdad que nos ayuda porque llegamos sin dinero para comprar esa ropa”.
Más de 150 personas migrantes venezolanas en Argentina recibieron esta donación hecha por la ONG BAires de Libertad.
“Ya tenemos más de cinco años ayudando a los más vulnerables. Desde que comienza el año andamos buscando donaciones por todas partes para tener al momento de necesitar”, comentó Denglys Romero, una maracucha que preside la organización.
“Es un trabajo de un gran equipo junto al padre Eusebio (Hernández), el párroco de la iglesia. Llegamos temprano a organizar toda la ropa que recibimos, al igual que los alimentos que entregamos. Es un esfuerzo que se hace, pero que llena de mucha satisfacción”, explicó Romero, mientras se le dibuja una sonrisa en el rostro.
Para esta ocasión, como hubo un pequeño retraso en tiempo, también las personas pudieron llevar verduras y alimentos en general que se les donó. “Para todos es una gran ayuda, pero para quienes van llegando al país muchísimo más porque no sólo se enfrentan a este frío polar sino también a que no consiguen trabajo rápido y lo primero que ganan es para pagar el alquiler”, dice.
Aunque la mayor cantidad de migrantes venezolanos llegaron a Argentina en el año 2018, aún siguen llegando otros, bien sea para pasar una larga temporada con familiares o porque han decidido hacer una nueva vida en el sur del continente.
“Nosotros hacemos un formulario por Google, el cual no dura ni cinco minutos porque son muchas personas necesitadas. Quisiéramos tener más para llegar a más personas, pero no tenemos los suficientes recursos, sin embargo, esta es la segunda jornada y aún estamos en otoño. Esperamos hacer otra antes de que entre el invierno para abrigar a más familias”.
En Argentina existen cientos de organizaciones no gubernamentales y asociaciones profesionales, pero son pocas las que dan este tipo de ayuda y BAires de Libertad es la única que mantiene un trabajo similar durante todo el año, de hecho no dependen de colaboraciones de grandes organizaciones como la OIM o ACNUR, sino que trabajan con donaciones de la empresa privada que les da los alimentos o ropa de ayudas, además a la iglesia donde funcionan llegan también donaciones particulares.
“De igual manera damos ayuda a cualquier migrante que lo necesite o personas de la calle. No pedimos un certificado de nacionalidad, la necesidad no tiene cara y nosotros no distinguimos, sino que ayudamos a todos por igual”, concluyó Romero.