El 30 de abril el mundo se sorprendió con la imagen de Leopoldo López libre, en las calles de Caracas, junto a Juan Guaidó. López aseguró que militares sublevados contra Maduro lo habían liberado de su detención domiciliaria y convocó a los ciudadanos a las calles para presionar la salida del oficialismo.
Horas más tarde, López se refugió en la embajada de Chile en Caracas con parte de su familia, mientras que 25 militares pidieron asilo en la de Brasil. Luego, él, su esposa Lilian Tintori y su hija se refugiaron en la embajada de España en calidad de “huéspedes”.
Esta mañana, luego de que Tintori denunció que su vivienda fue allanada, el Tribunal Supremo de Justicia, acusado por la oposición de servir al presidente Nicolás Maduro, comunicó que había una orden de captura contra López.
El opositor está acusado de violar la medida que le prohibía hacer pronunciamientos políticos ante los medios y el arresto domiciliario que tenía desde hace dos años tras ser condenado a casi 14 años de cárcel por dirigir protestas callejeras en 2014. Luego de pasar más de tres años en la cárcel militar de Ramo Verde, a las afueras de Caracas, el Tribunal Supremo ordenó a mediados de 2017 que cumpliera el resto de la condena en su casa.
“El juzgado, en su decisión, libra orden de aprehensión dirigida al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en contra del ciudadano Leopoldo López”, señaló un comunicado del TSJ.
López declaró, frente a la embajada española, que se mantiene en la condición de huésped.“No quiero volver a la cárcel pero no le tengo miedo ni a la cárcel, ni a Maduro, ni a la dictadura”, aseguró.
El líder del partido Voluntad Popular también dijo estar convencido de que se acerca “el cese de la usurpación” y que los venezolanos se han preparado para este momento. “Por más de 3 semanas me reuní en mi casa, en mi condición de arresto domiciliario, con generales, comandantes y nos comprometimos al cese de la usurpación en un proceso irreversible”, dijo. Reiteró que la esperanza es lo más importante, y la “única pelea que no podemos perder porque la dictadura quiere que perdamos el espíritu de lucha”.
VIDEO | @leopoldolopez: “No le tengo miedo a la cárcel, como no le tengo miedo a Maduro, como no le tengo a la dictadura” #2M pic.twitter.com/94MlSKC6ye— Centro de Comunicación Nacional (@Presidencia_VE) 2 de mayo de 2019
López dijo que confiaba en que la comunidad internacional no dejará de apoyarlos y que ya se preparan para la siguiente fase del plan: la transición de gobierno. Finalmente, pidió que el 30 de abril fuera reconocido como un día en el que “un grupo de venezolanas y venezolanos decidieron cumplir con su responsabilidad establecida en la constitución”, y no como un día en el que se intentó un golpe de estado.
Por su parte, el gobierno español anunció este jueves que no entregará a las autoridades venezolanas al opositor Leopoldo López, refugiado en la residencia del embajador español en Caracas y objeto de una orden de detención en ese país.
El gobierno de España “en ningún caso contempla la entrega de Leopoldo López a las autoridades venezolanas ni su desalojo de la Residencia del Embajador”, afirmó el ejecutivo en un comunicado, deseando también “encontrar una solución a la mayor brevedad posible”.
Es posible que la noticia intensifique las protestas de hoy, cuando Guaidó convocó a una huelga general para apoyar a los trabajadores públicos. Sin embargo, hay reportes de que Caracas amaneció el jueves en calma y los comercios, empresas y escuelas retornaron a sus actividades.
El ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, informó que se mantendrá el horario laboral y educativo restringido hasta las 14 horas en atención al plan de racionamiento que impuso el mes pasado el gobierno tras un apagón nacional que generó fallas en el sistema eléctrico.
*Con información de AFP y AP
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela