Desde mediados de abril la oposición venezolana, encabezada por Juan Guaidó, espera este día. Como parte de la ‘Operación Libertad’, que busca “el cese definitivo de la usurpación”, el opositor convocó a los venezolanos a las calles y prometió que sería la movilización más grande en la historia del país.
Las expectativas aumentaron este martes, cuando Guaidó y Leopoldo López, liberado por militares que respaldaron a la oposición, convocaron a manifestaciones como la última fase para “liberar” al país. Aunque algunos aseguran que la asistencia no fue la esperada, Guaidó prometió que hoy la oposición arremetería con más fuerza para desalojar a Maduro del poder.
A las 10 de la mañana se veía la llegada tímida de algunos venezolanos a los puntos de encuentro, comunicados por Guaidó a través de Twitter. Se temía que la asistencia no fuera masiva por la posible represalia de las fuerzas armadas y el agotamiento de la marcha de ayer.
Si bien Guaidó habló de una gran movilización hacia el Palacio de Miraflores en otros comunicados, no estableció hacia dónde debían caminar los venezolanos este 1 de mayo. Aún así, a las 11 de la mañana en varios lugares de Caracas y de Maracaibo ya habían cientos de personas congregadas en algunos puntos de esas ciudades. Así lo registraron antes del mediodía las redes de algunos líderes de la oposición como Henrique Capriles.
El oficialismo también convocó a manifestaciones con el lema “no al golpismo y no a la injerencia Yankee”. Luego de que Maduro calificara la movilización de ayer como un fracaso de la oposición, hoy también mide su poder de convocatoria y apoyo popular.
También se presentaron altercados con la Guardia Nacional Bolivariana, que hizo presencia en los puntos de encuentro a los que convocaron las marchas. Medios digitales y ciudadanos publicaron vídeos y fotos en los que los militares lanzan gases lacrimógenos a los venezolanos que se dieron cita en El Paraíso, una zona cercana al Palacio de Miraflores, al inicio de la jornada.
Además, decenas de opositores intentaron bloquear una autopista y lanzaron piedras y cócteles molotov hacia el interior de una base aérea, donde el martes un grupo de uniformados se sublevó contra el presidente Nicolás Maduro. Efectivos de la Guardia Nacional lanzaron gases lacrimógenos contra los manifestantes encapuchados, que formaban parte de una marcha de cientos de personas.
Nicolás Maduro salió con su esposa Cilia Flores a apoyar a los manifestantes. Guaidó, por su parte, dio un discurso en medio de la movilización. Llamó a una huelga general, reconoció que ayer los esfuerzos no fueron suficientes y le hizo otro llamado a los militares. Según Guaidó, la oposición no quiere enfrentamientos entre hermanos, sino que las fuerzas armadas “se pongan de lado de todo el pueblo”.
El presidente encargado de Venezuela también convocó a movilizaciones mañana, por el paro de los trabajadores públicos y aseguró que “todos los días de aquí en adelante vamos a tener acciones de protesta y vamos a demostrar que somos mayoría y que queremos un cambio”.
“El régimen va a trata de acentuar la represión, de perseguirme y creen que nos van a detener, pero nosotros tenemos un plan. Hoy lo que representa el régimen es la muerte, de los chamos en los hospitales, de que no haya agua, de que no haya luz. En cambio, la opción de cambio representa la vida”, agregó.
El día, para Venezuela, apenas empieza.
*Con información de AFP
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela
