Este domingo los habitantes de Villa de Leyva vieron al campeón del Giro de Italia en 2014, Nairo Quintana, pedalear por las montañas de este municipio boyacense. El ciclista del equipo Movistar participó en el Gran Fondo Nairo, una carrera que recauda recursos para apoyar a las escuelas que forman deportistas. Pero antes de eso, se encontró con al menos 200 niños para hablar sobre migración y xenofobia.
El viernes Quintana participó en un encuentro organizado en Villa de Leyva por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y Unicef. Allí se reunió con niños de Boyacá para apoyar la campaña Super panas, la estrategia de estas organizaciones para fomentar habilidades en niños y adolescentes que se pueden enfrentar a manifestaciones de xenofobia.
Super panas está dirigida a niños entre 10 y 17 años, y contempla cuatro propuestas para frenar la xenofobia: relaja tus músculos, tus ideas son más fuertes; ponte en los zapatos del otro, no todos somos iguales; conserva la calma y la xenofobia no es un juego.
Quintana habló sobre estos pilares desde su condición de migrante, pues vive en Mónaco hace más de tres años. El aclamado deportista dijo que no era fácil migrar, ni acostumbrarse a una nueva cultura o idioma, “pero cuando uno va con buenas intenciones las cosas están bien”. Además, rescató que el apoyo y la solidaridad de su equipo facilitaron su integración.
Aunque el conversatorio coincidió con la carrera del ciclista y por eso ocurrió en Villa de Leyva, también corresponde a una iniciativa de Acnur y Unicef para luchar contra el aumento de la xenofobia en Boyacá, donde aparecieron panfletos amenazantes contra los venezolanos en el último mes.
Como este departamento tambien limita con Venezuela, cientos de migrantes han llegado en los últimos años. Por eso, el Gobierno y algunas organizaciones iniciaron campañas y estrategias contra la xenofobia en Boyacá.
En el conversatorio también estuvo Aida Oliver, representante de Unicef, quien apoyó a Quintana y dijo que planean trabajar para que los niños “estén protegidos contra todo tipo de violencias y puedan sentirse en casa, donde quiera que estén”.
Con el evento, Unicef, Acnur y Quintana esperan impulsar un mensaje de solidaridad y empatía hacia la población refugiada y migrante en Colombia, que ya llega al millón y medio de personas. La mayoría salió de Venezuela por la profunda crisis económica que resultó en escasez de alimentos, medicinas e insumos básicos para una vida digna.
Para fomentar la empatía con esta población, la campaña creó la serie Amigos sin fronteras, que llegará a la programación de Señal Colombia en los próximos meses. Durante la charla de Quintana, proyectaron el primer capítulo de la serie, que les muestra a los niños la importancia de no generalizar a todas las personas de Venezuela por los errores que cometen unos pocos.
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela
