La cada vez más creciente regularización y la consolidación del acceso de las personas venezolanas a productos financieros abrieron las puertas a la gestión de emprendimientos de los migrantes. Un experto explica qué hacer para que sea las apuestas sean exitosas.

La recuperación de la economía tras la parte más compleja de la pandemia ha significado la posibilidad de que muchas personas que perdieron sus puestos de trabajo o que jamás lograron tener un empleo formal le apuesten ahora a montar su propio negocio, y por eso es clave tener un norte claro de cómo hacerlo sin poner el riesgo el capital a invertir.

Andrés García, profesor de la facultad de economía de las Universidad del Rosario e investigador de la Alianza Efi, asegura que es clave tener una hoja de ruta clara, y entrega unos consejos que harán que los emprendedores venezolanos puedan llevar a buen puerto ese sueño.

1.  Regularícese y mantenga en regla su documentación

Sólo de esa forma podrá tener acceso a los servicios que ofrece el sector financiero, tanto a nivel de bancos como de cooperativas, y a los capitales semilla que se proveen por diferentes vías.

“No olvidemos que el apalancamiento financiero es totalmente crucial para el emprendimiento, no sólo para el acceso a crédito sino para la extensión del negocio”, asegura García.

2.  Aproveche la oferta institucional gratuita para capacitarse

Diferentes entidades públicas y privadas, tanto a nivel nacional como local,  tienen cursos gratis de formación empresarial, muchos de los cuales se hacen por internet, y enseñan cosas básicas de emprendimiento.

“Aprenderán temas esenciales como las habilidades gerenciales, las habilidades de contabilidad y entender a identificar cuáles son las oportunidades que se generan en los mercados locales; tener información es clave”, explica García.

3.   Aproveche la oferta con enfoque diferencial

Muchos de esos programas tienen más beneficios para aquellos segmentos de población que fueron más afectados por la pandemia y que tienen más riesgo de vulnerabilidad o requieren generar ingresos por primera vez.

“Las mujeres cabeza de familia, los jóvenes pueden encontrar en ese aspecto una oportunidad de largo plazo hacia la formalización”, sostiene el académico.

Lo que es claro, según los expertos de la Universidad del Rosario, el banco Mundial y la Alianza Egi, que adelantan un estudio sobre el tema, es que las personas venezolanas, una vez llegan a Colombia y viven su proceso de adaptación, tienen todo el potencial para destacarse laboralmente y generar emprendimientos.

“Una vez logran engancharse en el mercado laboral hay una evolución importante en términos de reducción de la tasa de desempleo, en la medida en que permanecen en Colombia, y un aumento de sus ingresos”,  sostiene García.

Por: Mario Villalobos @maritovillalobo