Este viernes, el gobierno de Venezuela suspendió la jornada laboral y las clases por el apagón masivo de casi 16 horas que afecta a la mayoría del país. Nicolás Maduro tomó esa decisión “en aras de facilitar los esfuerzos para la recuperación del servicio eléctrico en el país, víctima de la guerra eléctrica imperial”, tuiteó la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez.
La energía eléctrica se cortó en Caracas desde las 4 de la tarde del jueves, provocando el colapso del tráfico debido al desalojo del metro y fallas de los semáforos en las calles. Cientos de personas tuvieron que caminar varios kilómetros tras salir de sus trabajos.
Entre ocho y once horas después de iniciado el corte del suministro eléctrico, algunas luces comenzaron a encenderse en edificios del este de la capital.
El apagón también afectó al aeropuerto internacional Simón Bolívar, según reportes de viajeros en las redes sociales. Además, se suspendió un partido entre el Deportivo Lara, de Venezuela, y el Emelec de Ecuador, por el Grupo B de la Copa Libertadores, previsto para la noche de este jueves en la ciudad de Barquisimeto y reprogramado para el viernes por la tarde
Entrada la noche, al cabo de siete horas, el servicio seguía sin restablecerse. En algunos sectores de Caracas, los habitantes hicieron sonar cacerolas en señal de protesta. En la capital, ciudad con altos índices de criminalidad, la población procuró regresar a sus casas con la luz del día y casi no hubo actividad nocturna.
De acuerdo con reportes de la prensa local, el apagón afecta prácticamente a toda Venezuela, con cortes en 23 de los 24 estados y en la capital. A la vez, fallan las líneas telefónicas y la internet.
Expertos responsabilizan al gobierno socialista por falta de inversiones en el mantenimiento de la infraestructura en medio de una grave crisis económica, pero altos funcionarios denuncian frecuentemente actos de “sabotaje”.
Casi a la medianoche, la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, denunció un “ataque de gran envergadura”, pero aseguró que comenzaba a recuperarse el servicio en los estados de Bolívar, Anzoátegui, Monagas y Nueva Esparta, en el este del país. Rodríguez responsabilizó a “sectores extremistas” y apuntó también al senador estadounidense Marco Rubio, al que calificó como “reportero del crimen”.
Horas antes, el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, había aseverado que se trató de un “sabotaje criminal, brutal” que busca dejar a Venezuela sin suministro eléctrico durante “varios días” y también acusó a Rubio.
“La guerra eléctrica anunciada y dirigida por el imperialismo estadounidense en contra de nuestro pueblo será derrotada. Nada ni nadie podrá vencer al pueblo de Bolívar y Chávez. ¡Máxima unidad de los patriotas!”, tuiteó por su lado Maduro.
Hace un año, Maduro ordenó a la Fuerza Armada activar un plan especial para custodiar instalaciones del sistema eléctrico ante lo que llama una “guerra eléctrica” para generar descontento popular, pero las fallas persisten. La compañía eléctrica Corpoelec denunció, sin dar mayores detalles, un sabotaje en el embalse, ubicado en el estado Bolívar.
*Con información de AFP
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela