Dayanna Palmar: Una voz incansable en la lucha por los derechos en la Guajira

Dayanna Palmar es coordinadora de proyectos de la Comisión para los Derecho Humanos del Estado de Zulia, Venezuela y también es coautora del texto ‘Teje la defensa de los derechos humanos en la Guajira Venezolana” publicado en el libro `Frontera Común’ (Crédito: Colprensa - Jhon Paz)
Dayanna Palmar es coordinadora de proyectos de la Comisión para los Derecho Humanos del Estado de Zulia, Venezuela y también es coautora del texto ‘Teje la defensa de los derechos humanos en la Guajira Venezolana” publicado en el libro `Frontera Común’ (Crédito: Colprensa - Jhon Paz)

La defensa de los derechos humanos es una tarea compleja en cualquier parte del mundo, pero existen lugares en los que las dificultades se multiplican y los obstáculos parecen insuperables, uno de estos es La Guajira, un territorio fronterizo entre Venezuela y Colombia. 

Por Camila Avá Rivera – Periodista MigraVenezuela

La lucha por los derechos humanos es un desafío constante en diferentes partes del mundo. Sin embargo, hay lugares en los que este desafío adquiere proporciones desgarradoras, donde la falta de recursos, la marginalización y la indiferencia gubernamental se convierten en obstáculos inmensurables.  

Un ejemplo de ello es la Guajira, un territorio fronterizo entre Venezuela y Colombia, habitado en su mayoría por la comunidad indígena Wayúu, donde la defensa de los derechos humanos es una batalla cotidiana.  

En medio de esta realidad, encontramos a Dayanna Palmar, coordinadora de proyectos de la Comisión para los Derechos Humanos del Estado de Zulia en Venezuela y coautora del texto “Tejer la defensa de los derechos humanos en la Guajira Venezolana”, publicado en el libro “Frontera Común”.

 

Dayanna Palmar es coordinadora de proyectos de la Comisión para los Derecho Humanos del Estado de Zulia, Venezuela. (Crédito: Colprensa - Jhon Paz)
Dayanna Palmar es coordinadora de proyectos de la Comisión para los Derecho Humanos del Estado de Zulia, Venezuela. (Crédito: Colprensa – Jhon Paz)

Dayanna compartió con nosotros las duras realidades de defender los derechos humanos en La Guajira. Para los Wayúu, el concepto de “frontera” resulta incomprensible, ya que consideran a este territorio como único e indivisible, tanto en el lado colombiano como en el venezolano. 

Los gobiernos y sus fronteras artificiales carecen de significado para el pueblo Wayúu. Según Palmar, los hitos fronterizos y las distinciones no importan, ya que los Wayúu han habitado La Guajira desde tiempos inmemoriales, mucho antes de que existieran Venezuela y Colombia como Estados. 

Palmar nos revela que Zulia es uno de los estados con mayor índice de seguridad alimentaria en Venezuela, pero en La Guajira esa situación se desvanece rápidamente. “El 98% de la población está sumida en la pobreza extrema”, señala con preocupación. Desde 2018, han llevado a cabo encuestas sobre la seguridad alimentaria en la región, evidenciando la crítica situación que enfrentan sus habitantes. 

Otro aspecto crucial destacado por Palmar es el acceso a los servicios públicos. En La Guajira, la electricidad llega de manera intermitente desde el inicio de la crisis eléctrica en Venezuela en 2019. Esta realidad desconecta a la población de lo que ocurre a nivel nacional. La señal telefónica y el acceso a internet también son escasos en muchos lugares, lo que agrava aún más la brecha digital. 

“Las casas u hogares que tienen internet son aquellos que pueden pagar el servicio, pero esto no aplica para la mayoría de la población”, afirma Palmar con pesar. La comunidad se encuentra enfocada en satisfacer sus necesidades básicas y preocupada por la incertidumbre de tener algo que comer cada día. 

En contraste, en Caracas, la capital de Venezuela, la situación es diferente. Las personas no se quejan tanto de la electricidad, pero en regiones como Maracaibo, y especialmente en La Guajira, la situación es mucho más grave. Palmar explica: “¿Quién se va a acordar de ellos? En Maracaibo podemos pasar de 4 a 6 horas sin luz, pero en La Guajira pueden llegar a pasar hasta tres días sin electricidad“. 

Esta falta de atención y apoyo por parte de los gobiernos hacia La Guajira es alarmante. Palmar describe el nivel de abandono al que se enfrentan los habitantes de la región como impresionante: “Hacen como si no existieran”. 

El combustible es otro obstáculo que enfrenta la población. En Caracas, no hay una crisis de combustible, las personas pueden ir y comprar con su tarjeta de débito en bolívares. Sin embargo, en Maracaibo, y en otras zonas distintas a la capital, las colas para obtener gasolina debido al desabastecimiento son una realidad cotidiana.  

Acceder al combustible implica pasar largas horas en fila, incluso en tiempos de crisis como el año 2019 y el período posterior a la pandemia. La falta de movilidad afecta gravemente la capacidad de las personas para ir al trabajo, a la escuela e incluso para acceder a servicios de salud. Incluso en situaciones de emergencia, como una picadura de serpiente, la falta de combustible puede impedir que una persona reciba atención médica a tiempo. 

De hecho, Dayanna nos cuenta que, en regiones como la Guajira venezolana, los pagos se hacen en pesos colombianos, “la moneda que circula es el peso colombiano, entonces tienes que cambiar. La gente se da cuenta de que el bolívar no vale nada. Para qué lo reciben entonces prefiero cambiar en Colombia a la que me puedo mover, o ir a la Guajira colombiana.” 

Ante la pregunta de si existe la posibilidad de que los Wayúu emigren, Palmar responde que no considera que sea una opción viable. La migración segura y satisfactoria para los venezolanos es prácticamente inexistente debido a la falta de condiciones adecuadas. Menciona que países de América del Sur como Perú y Chile han comenzado a exigir visas para la entrada de venezolanos, mientras que Colombia ha sido el país que mejor ha acogido a los migrantes venezolanos en la región. 

Dayanna Palmar es coautora del texto ‘Teje la defensa de los derechos humanos en la Guajira Venezolana” publicado en el libro `Frontera Común’ (Crédito: Colprensa - Jhon Paz)
Dayanna Palmar es coautora del texto ‘Teje la defensa de los derechos humanos en la Guajira Venezolana” publicado en el libro `Frontera Común’ (Crédito: Colprensa – Jhon Paz)

Si bien se han implementado programas como el Estatuto de Protección Temporal en Colombia, el proceso para regularizar la situación y poder trabajar legalmente puede llevar más de seis meses. La integración socioeconómica sigue siendo muy difícil para los venezolanos, a pesar de los esfuerzos realizados. 

La Guajira continúa siendo un territorio abandonado, donde la pobreza extrema, la falta de servicios básicos y el desprecio de los gobiernos son una triste realidad. La labor de defensa de los derechos humanos en este lugar desolado requiere valentía y perseverancia. Dayanna Palmar y muchos otros continúan luchando por garantizar la dignidad y el bienestar de la comunidad Wayúu en medio de estas difíciles circunstancias. 

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