Las investigadoras Neyda Albornoz y Akever Karina Santa Fé- Rojas determinaron los factores de personalidad y comportamiento de 88 migrantes propietarios de unidades productivas del área urbana de Gramalote, en Norte de Santander.
¿Qué características de su personalidad y qué cualidades tienen los migrantes emprendedores venezolanos para lograr éxito en sus negocios? este interrogante fue despejado por dos investigadoras de la Universidad Simón Bolívar, Cúcuta, y de la Universidad de Pamplona.
Las docentes universitarias Neyda Albornoz y Akever Karina Santa Fé- Rojas centraron su estudio en el municipio Gramalote, de Norte de Santander. Allí, realizaron encuestas estructuradas a 88 migrantes venezolanos mayores de 18 años, empresarios de unidades productivas en esta zona fronteriza con Venezuela.
De la población objeto de estudio, el 46,6 por ciento fueron mujeres y el 53,4 por ciento fueron hombres. Grupo de edad: el 22,7 por ciento tenía entre 18 y 34 años, el 26,1por ciento tenía entre 35 y 49 años y el 51,1 por ciento tenía más de 50 años. Destacan las investigadoras que el 68,2 por ciento de los emprendedores generó empleo en este municipio de Norte de Santander.
Un aspecto que resalta en los hallazgos es que los hombres emprendedores tienen mayor confianza en sí mismos y aprovechan las oportunidades y crean redes de apoyo con otros emprendedores. “Esto aumenta la probabilidad de desarrollar un nuevo negocio, a diferencia de las mujeres, que se ven impulsadas a iniciar un negocio solo por su situación laboral y confianza en sí mismas”, explica la investigadora Neida Albornoz, quien añade que el 40,9 por ciento de la muestra consultada en este estudio presenta niveles de educación universitaria.
Sobre este punto —enfatiza Albornoz— los emprendedores con formación en universidades venezolanas se caracterizan por tener un espíritu emprendedor con autoconfianza, persistencia y visión innovadora, entre otros rasgos.
“Cuanto mayor es la percepción de riesgo, mayor es el aumento de la confianza en sí mismo. El caso de los emprendedores migrantes es especial, porque el primer riesgo que corren es dejar todo lo que tenían en su propio país para buscar el crecimiento económico y social en el país receptor. Esta propensión al riesgo se relaciona positivamente con las intenciones de autoempleo influenciadas por la autoconfianza”, analiza la docente universitaria.
Precisamente, según datos recolectados por el Observatorio del Proyecto Migración Venezuela, de la Gran Encuesta Integrada de Hogares del Dane, a enero de 2020, el hecho de no encontrar un trabajo asalariado motivó a poco más de la mitad de los migrantes venezolanos ocupados a trabajar por cuenta propia, y el 22,6 por ciento lo hizo para tener más independencia, y el 57 por ciento por tener un horario flexible.
Las investigadoras también explican que la propensión al riesgo de los migrantes venezolanos está relacionada con la motivación emprendedora, lo que permite comprender cómo el capital humano y social influye en la actividad emprendedora
“Al tratarse de una migración forzada por la crisis socioeconómica y la inestabilidad política en el país de origen, estas personas conservan tradiciones, emprendimiento y habilidades después del asentamiento. Además aprovecha nuevos aprendizajes, fomentan redes en la sociedad, lo que repercute positivamente en el emprendimiento del migrante venezolano”, refiere el estudio.
Albornoz y Santa Fé- Rojas recomiendan al Gobierno colombiano tomar las siguientes medidas para la integración de esta población migrante:
– Identificar a los empresarios migrantes venezolanos a través de un censo brindarles asesoría gratuita para la formalización de sus negocios a través de una vía simplificada de trámites, requisitos y documentos a tramitar.
-Sensibilizarlos y educarlos en el marco de la formalización de sus negocios.
– Flexibilizar las barreras económicas, especialmente el acceso al financiamiento de proyectos empresariales que demuestren viabilidad.
– Fomentar la formación para el emprendimiento con enfoque de género, orientada a la motivación pull, fortaleciendo así los rasgos de personalidad y los rasgos de comportamiento.
Por: Milagros Palomares @milapalomares
