Abril Schreiber, actriz venezolana que ha hecho parte de grandes producciones en Venezuela, Colombia y México, no emigró por motivos políticos o económicos, sino por las necesidades de su carrera, pero sabe lo que es hacerse un nombre en otro país.

Por Martha Cotoret – Te lo Cuento News

Abril Schreiber tiene un gran amor: su trabajo. Desde que debutó en 2005 en la pantalla chica no ha podido dejar de actuar. Su carisma y disposición para adaptarse a nuevas realidades le han abierto las puertas en producciones como Amor a palos (2005), El desprecio (2006), Pura pinta (2007), Tomasa Tequiero (2009) y La mujer perfecta (2010).

En Colombia fue parte del elenco de las telenovelas, Niche (2014), Narcos (2016), Sin senos si hay paraíso (2017); y, en México, participó en las producciones El Chapo (2017), Tijuana 1​ (2019), Falsa identidad (2020), Amor dividido (2022) y El Galán (2022). 

“En Colombia, viví más o menos siete años maravillosos donde desarrollé mi carrera actoral. En 2012, decidí irme a ese país porque me gustaba lo que se hacía ahí, las producciones para televisión y empezaban las series. Y, en ese entonces, la ciudad me enamoró sin duda. Fui muy feliz”, afirma la actriz, productora y cantante venezolana-austriaca, en entrevista exclusiva para MigraVenezuela.

Abril explica que, aunque en Venezuela la crisis golpeó a la actividad artística, como a todos los sectores, su decisión de migrar no tuvo que ver con estas circunstancias. “En mi caso fue una decisión independiente de la crisis. Siempre quise irme y así lo hice”, manifestó.

La actriz se siente como pez en el agua en otros territorios. Para ella, trabajar acentos es una herramienta necesaria, “y creo que acerté con esa decisión porque me abrió muchas puertas, y lo sigo haciendo”. 

Tanto Colombia como en México decidió empezar de cero y así lo hizo. “Empezar siempre es ‘difícil’, si decides verlo así. Yo, en ese entonces, disfruté cada paso, incluso cuando, viéndolo en la distancia, fue duro. Lo mismo cuando vine a CDMX, y será así seguro si decido mudarme otra vez”. 

La carrera de Abril va en ascenso: este año terminó una serie para StarPlus que se llama “Mamita” e hizo “Travesuras de la Niña mala 2” para Vix. “También estoy produciendo un largometraje, el primero que produzco en México, una comedia romántica junto a Zair Montes y Guillermo Iván Dueñas, El Elixir del Amor, en el que también actúo. 

Para Abril, la actuación lo es todo. “Amo actuar desde el momento en el que probé estar en un escenario. Es adictivo para mí, me hace inmensamente feliz. Quiero tener la bendición de trabajar siempre, hace poco vi un video de Jane Fonda en el que dice que, a sus 85 años, ella está sorprendida de seguir actuando, de sentirse y verse más joven… Sueño con siempre actuar y que mi trabajo cambie al menos la vida de una persona que lo vea y lo disfrute. Es un sueño, sin duda”, concluye.