Más de nueve mil personas han pasado por el Centro Intégrate Cartagena. Son muchas las historias de superación que allí se gestan.
Por Diego Alonso Rosales – periodista El Universal de Cartagena
Cartagena han llegado durante los últimos años al menos 70 mil migrantes venezolanos que se enfrentan día a día a cientos de obstáculos, en su mayoría de índole económicos y sociales. Grisel Chirinos es una venezolana que hace parte de ese éxodo. Ella, al venir a Colombia, huyendo de una persecución política en su país, se enfrentó a la pobreza extrema, al rechazo de la sociedad y a afectaciones en su salud, situaciones que fue superando poco a poco.
Y es que el drama de la migración venezolana ha tocado incluso a colombianos retornados que se exponen a estos y otro tipo de desafíos al regresar al país, como Sendy Galvis, quien migró a Venezuela cuando era una niña y, por la crisis del país vecino, tuvo que regresar a Colombia.
Ella se enfrentó a trochas, a la pobreza e, incluso, aun siendo colombiana, al rechazo por parte de sus coterráneos que no le daban empleo por tener acento venezolano.
Ante este tipo de casos, como el de Grisel o el de Sendy, el Centro Intégrate Cartagena ha sido una luz en el camino. Ese lugar, con un robusto equipo interdisciplinario, entra en acción convirtiéndose en “un espacio seguro e incluyente”, como afirma su director Orlando Castro, donde se brinda ayuda por igual a población migrante venezolana, a retornados y a cartageneros.
Después de iniciar sus actividades en Cartagena hace casi un año, gracias a la Alcaldía Distrital y al apoyo de entidades de cooperación internacional como Acnur, Usaid y OIM, el Centro Intégrate presentó un balance de sus servicios, cifras y proyectos en el evento ‘Intégrate Avanza’, realizado ayer en el auditorio de El Universal.
Un evento de unión
En ‘Intégrate Avanza’ se promovió la comprensión y la cooperación entre diversos grupos de población en la ciudad, reuniendo a migrantes venezolanos, miembros del entorno educativo de Cartagena, directivos de varias asociaciones, colombianos retornados y periodistas, en un mismo espacio, donde primó el respeto y la escucha.
La primera en subir al escenario fue Ibelis Blanco, docente y socióloga venezolana, que trabaja en la Universidad San Buenaventura, y que intervino hablando sobre la migración, centrándose en las razones que llevan a las personas a migrar y a escoger países como Colombia para residir. “Lo hacen porque tienen familiares aquí o conocen el territorio”, afirmó la docente, quien agrego que: “A diferencia de Venezuela, que siempre ha recibido migrantes, para Colombia esto es algo nuevo”.
Ante esta situación y, teniendo en cuenta la poca información que reciben los migrantes para su ayuda, Ibelis cerró su intervención recomendando programas que promueven la cohesión social y son de gran ayuda para migrantes venezolanos, como Ven Esperanza 2.0, Empléate Sin Fronteras, Avanzando al futuro y Transformemos Sin Fronteras.
Sobre el Centro Intégrate
Luego llegó el momento para Gabriela Méndez y Ana González, gerente de migraciones de la Alcaldía y la coordinadora de seguimiento del Centro Intégrate, respectivamente, quienes afirmaron que “uno de los objetivos de este sitio es recuperar la confianza en las instituciones” y, sobre todo, “fortalecerlas desde su accionar”.
Además, explicaron la forma en que se realizan las atenciones en el Intégrate, dejando claro que “cada caso es especial y debe ser tratado de forma personalizada”, pero que “todos son escuchados, luego enrutados al área de pertinencia” y, finalmente, “atendidos por los profesionales del Centro”, quienes prestan sus servicios de forma gratuita.
“Estamos a punto de cumplir un año de servicios y, en ese tiempo, hemos prestado servicios y atendido a más de 9.300 usuarios”, afirmó Ana González, quien, además, añadió que “la mayoría de solicitudes son para servicios relacionados con el área de la educación”, así como solicitudes sobre el Sisbén y de empleabilidad.
Compartiendo experiencias
Después de una ronda de preguntas, el evento siguió con la presentación de historias de personas que fueron beneficiadas por los servicios del Centro Intégrate, quienes, en una charla moderada por Melissa Mendoza, periodista de El Universal, llegaron a la conclusión que su vida mejoró gracias al apoyo que han recibido en ese lugar, que también contempla entre sus servicios la intervención sicológica. Entre los testimonios, Grisel y Sendy narraron cómo han cambiado sus vidas, luego de tener la oportunidad de acceder a cursos y a oportunidades de formación que les han servido para emprender y para sacar a sus familias adelante.
El evento finalizó con un conversatorio entre Diandra Payares y Francisco Maza, docentes de la Universidad de San Buenaventura y de la Universidad de Cartagena, respectivamente, en compañía de Eliana Salas, directora de Cartagena Cómo Vamos, quienes tomaron como eje de su conversación las formas en que se puede cambiar las generalizaciones sobre la migración desde una perspectiva educativa.
Se concluyó que la proyección es que, a 2024, el Centro Intégrate duplique los usuarios atendidos y llegue a las 20 mil personas beneficiadas con los servicios que allí se prestan