La llegada de un millón y medio de migrantes a Colombia que escapan de Venezuela se ha convertido en uno de los grandes retos para el Gobierno. Aunque ministros, magistrados y congresistas han puesto en marcha diferentes mecanismos para asegurar los derechos fundamentales de esta población, aún hace falta garantizarle salud, educación y atención integral.
El camino no es fácil. Si bien hay unas nociones básicas sobre lo que requieren los refugiados y migrantes en Colombia, pocas entidades han investigado y analizado las necesidades de esta población. Ante este vacío, y con el apoyo de la Personería de Medellín y el Proyecto Migración Venezuela, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) encontró la manera de escuchar las opiniones, necesidades, perspectivas y aportes de la población migrante que se encuentra en la capital de Antioquia.
A través de ECHO, una herramienta que escucha las voces de las personas y las traduce al lenguaje de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), los gobernantes y tomadores de decisiones podrán conocer las necesidades de la población proveniente de Venezuela para construir políticas públicas que garanticen derechos y promuevan la Agenda 2030, una hoja de ruta de las Naciones Unidas para el desarrollo sostenible y una sociedad más igualitaria.
¿Cómo funciona?
ECHO utiliza el reconocimiento de voz automático, la computación cognitiva y el análisis de datos para mejorar la eficiencia en el procesamiento de información sobre discusiones públicas guiadas. A través de un dispositivo, la herramienta traduce en tiempo real las palabras de los participantes al lenguaje de los ODS.
Hace dos semanas, Unfpa, la Personería de Medellín y Proyecto Migración Venezuela organizaron el primer ejercicio con refugiados y migrantes en la comuna 10 de la capital antioqueña. Allí, Echo escuchó a 60 personas migrantes que relataron su historia, sus principales desafíos al vivir en Colombia y cuánto pueden aportar a la comunidad.
Una de ellas fue María Ángeles González, quien llegó a Colombia con su hija de un año hace cuatro meses: “Ha sido una dura experiencia -dijo- , pero nadie se había parado a preguntarnos sobre nuestra situación, solo quiero un trabajo digno y salud para mi niña”.
Echo relacionó el relato de María Ángeles con los ODS que aplican a su caso, como salud y bienestar (ODS 3) y Educación de calidad (ODS 4). En general, los funcionarios de Unfpa encontraron que los testimonios de la población de Venezuela reflejan su situación de pobreza (ODS 1) y la necesidad de un trabajo digno (ODS8).
El ejercicio también mostró que desean aportar desde sus capacidades (ODS 4) al desarrollo de la ciudad a través de su fuerza laboral (ODS8) y a la construcción de una sociedad incluyente, justa y en paz (ODS 16).
¿Para qué sirve esta información?
Con los datos obtenidos, ECHO brinda información de primera mano para la formulación de políticas públicas y la planificación territorial de manera consistente con los ODS.
“ECHO es innovación social, demuestra cómo los sectores pueden usar la inteligencia artificial para contribuir al bienestar humano sin dejar a nadie atrás”, dice Verónica Simán, Representante del UNFPA Colombia.
Para Guillermo Durán Uribe, personero de Medellín, el objetivo principal de ECHO es caracterizar a la población venezolana que habita Medellín “en clave de cuatro variables: salud, educación, empleabilidad y habitabilidad. De acuerdo con estos factores, lo principal en este momento es regular la situación migratoria de estos ciudadanos”.
¿Qué viene ahora?
Unfpa planea realizar otros ejercicios, como el de la Comuna 10, en Medellín, para capturar información con datos clave en el lenguaje de los ODS. Las organizaciones compartirán los resultados con tomadores de decisiones en la capital de Antioquia, donde viven más de 50.000 ciudadanos venezolanos, según cifras de Migración Colombia.
En el año 2020 continuará el recorrido por las distintas comunas de Medellín, para que la población en condición migrante siga hablando de su historia y su voz influya en la construcción de la agenda pública local.
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela