Klis Romero, junto con su esposa, se reinventó como vendedor de tinto en las calles.
Angélica Antía Azuaje –Periodista de TelocuentoNews
Klis Romero es un talentoso fotógrafo venezolano que llegó a Colombia el 8 de octubre de 2017. Desde entonces, ha enfrentado diversos retos y aprendido a adaptarse a su nuevo entorno en la ciudad de Manizales.
La situación económica en Venezuela fue una de las razones principales que impulsaron a Klis a tomar la decisión de emigrar. Las dificultades para mantenerse económicamente y la necesidad de brindar un futuro mejor a su hijo fueron factores determinantes. Klis relata cómo su esposa emigró primero a Barranquilla, buscando una oportunidad, y luego se reunieron en Manizales, donde encontraron una comunidad amable y trabajadora.
Para lograr una buena integración, sugiere ser flexible, participar en nuevas actividades, probar la comida local y tratar de mezclar las experiencias con la propia personalidad. Además, enfatiza que el respeto y la comprensión son clave para navegar la diversidad cultural y valorar las diferencias entre países.
La inclusión en la comunidad colombiana
Klis destaca la amabilidad de la gente y su disposición para ayudar y hacer recomendaciones. Además, ha encontrado apoyo en personas con intereses similares y en su familia extendida en Colombia. Aunque reconoce que cada individuo tiene una experiencia única, subraya la importancia de mantener el contacto con la familia y amigos en Venezuela para compartir emociones y experiencias.
Uno de los desafíos más significativos para Klis ha sido lidiar con la burocracia y la dificultad para obtener ciertos derechos y servicios en Colombia. A pesar de ello, ha logrado establecerse y desarrollar su carrera como fotógrafo. Actualmente, trabaja junto a su esposa como vendedor ambulante de café en las calles de Manizales, mientras continúa sus estudios en fotografía y video en la universidad. Sus metas incluyen formalizar su negocio y hacer crecer un emprendimiento de accesorios.
Colombia como oportunidad, refugio y hogar
Para Klis, Colombia significa oportunidades y un refugio seguro. Le ha brindado la posibilidad de acceder a derechos y servicios básicos, así como de emprender y desarrollar su talento. Además, destaca el sentido de hogar que encuentra en Colombia, con sus raíces comunes y su facilidad para entablar conexiones y relaciones positivas.
Para él, Venezuela es una parte esencial de su identidad y un país que ama y defiende. Aunque reconoce las dificultades y la crisis que atraviesa su país de origen, Klis siente una profunda añoranza por su tierra natal y valora todo lo que ella representa en su vida.
Klis expone que, a pesar de los obstáculos, se puede encontrar un nuevo hogar y forjar un futuro prometedor.