Desde empleos soñados hasta ayudas gubernamentales, pasando por falsas donaciones y herencias: de todo se encuentra en las redes sociales y las cadenas de WhatsApp, y decenas de migrantes son engañados. Consultamos a expertos para que nos expliquen cómo estar alerta.
Unos por vergüenza y otros por rabia, pero casi todos callan cuando son víctimas de una cadena que contenía mentiras, y esa bola de nieve que creció por falta de reflexión a la hora de replicar un contenido digital puede causar daños insospechados.
Ya hay expertos dedicados a rastrear las fake news o noticias falsas que pueden afectar a las personas venezolanas. Entre los más reconocidos está el Proyecto Conectando Caminos por los Derechos, de Colombiacheck, que a diario tiene el radar prendido.
“Por un lado, hace un monitoreo en redes sociales sobre las desinformaciones que pueden afectar a la población migrante, y, por el otro, tiene contacto con las organizaciones migrantes de todo el país”, asegura Ana María Saavedra, editora del portal Colombiacheck, un medio de comunicación dedicado a la verificación de información o fact cheking.
Uno de sus periodistas, Jhoandry Suárez, quien ha desmentido decenas de rumores que circulan por redes sociales y en servicios de mensajería, aconseja a sus paisanos que apelen al sentido común para evitar caer en errores inducidos.
“Algo básico y sencillo es googlear la información que está recibiendo, y segundo, preguntarle a su entorno y a sus amigos qué saben sobre lo que está recibiendo, y quizá con esta red que se está formando allí otros investigan si es verdad o no”, asegura.
Otro de los consejos es que si reciben ofertas de supuestas ayudas oficiales verifiquen la información en la fuente directa y desconfíen siempre de lo que les envían y les parezca sospechoso.
“Siempre ir a las cuentas oficiales, a ver si las cuentas dicen eso; también desconfíen de esas cadenas que tienen muchas mayúsculas, errores ortográficos, de cuentas que les piden que dejen datos o que hacen ofertas demasiado increíbles”, explica el comunicador.
En su trajinar ha confirmado que los inescrupulosos son muy ingeniosos para enredar a los migrantes, estafarlos e incluso poner en riesgo su vida, a cambio de dinero.
“Que para acceder a la entrevista de trabajo tienen que dar dinero, o, que vayan a un lugar y pueden ser víctimas de secuestro o de trata de personas; entonces hay desde el simple robo de información personal hasta estos casos mucho más graves”, confirma.
Ahora bien, una de las tareas más urgentes, según Ana María Saavedra, es que todos “debemos entendernos como ciudadanos digitales, con derechos, pero también con responsabilidades y es vital la alfabetización digital”.
Y en ese sentido, hace un llamado para que cada vez que un migrante reciba en su celular o computador una información proceda a verificarla y a hacerse una serie de preguntas básicas.
“Compartir algo a través de cadenas de WhatsApp, de Facebook, de nuestro Twitter, Tik Tok, equivale a cierta responsabilidad sobre lo que estamos compartiendo y hacer preguntas básicas como: ¿Por qué lo estoy compartiendo? ¿esto de dónde salió? ¿estoy seguro que es verdad o estoy causando algún daño?”, asegura.
Por eso, si usted es migrante, tiene la responsabilidad de chequear qué tipo de información replica o reenvía, porque en internet, tal como sucede en la vida real, no todo lo que brilla es oro.
Por: Mario Villalobos @maritovillalobo