Desde principios de mayo habitantes de La Guajira, Arauca y Norte de Santander denuncian escasez de gasolina. Sin embargo, hasta hace dos semanas las autoridades prendieron las alarmas, cuando empezaron a formarse filas de carros que parecían interminables en las estaciones de servicio.
La escena no es nueva. En 2015, durante el gobierno de Juan Manuel Santos, el Ministerio de Minas y Energía aprobó un aumento en el cupo de combustible subsidiado -un número de galones asignados por departamento- para las zonas fronterizas. En ese momento, el cierre de frontera promovido por Maduro desató la crisis.
Esta vez, la demanda aumentó en Colombia por el desabastecimiento de gasolina en Venezuela, que el oficialismo justifica con las sanciones económicas de Estados Unidos, pues el 28 de abril empezó a regir un embargo estadounidense sobre el petróleo de ese país.
Las sanciones dificultan la compra de gasolina a empresas estadounidenses, de las que Venezuela adquiere parte de lo que compra en el exterior para suplir su déficit interno. Como resultado, los venezolanos tienen que pasar mucho tiempo, incluso toda la noche, en fila para conseguir combustible.
Por otra parte, la oposición afirma que el colapso de la industria petrolera venezolana responde a la mala gestión del gobierno, a la falta de inversión y a la corrupción en PDVSA. En cualquier caso, la ausencia de combustible a ese lado de la frontera obliga a muchas personas a abastecerse en Arauca, La Guajira o Norte de Santander.
Más cupo a zonas de frontera
A raíz de eso, en las últimas semanas los colombianos encontraron algunas estaciones de servicio cerradas por falta de gasolina y demoras para tanquear sus vehículos. Ante esa situación, los gobernadores de Norte de Santander y La Guajira solicitaron al Ministerio de Minas y Energía que aumentara el cupo de galones subsidiados que tiene mensualmente cada departamento.
Por el desabastecimiento de 2015, el gobierno expidió ese año el Decreto 1073, que establece unos cupos de combustible con beneficios para los departamentos ubicados en zonas de frontera, por lo que el precio de la gasolina disminuye.
Diego Mesa, el viceministro de Minas y Energía, cartera que define el cupo departamental, aseguró que, frente a la solicitud de los gobernantes, incrementaron la cantidad de galones subsidiados a La Guajira, Norte de Santander y Arauca.
En La Guajira aumentaron el cupo en 307 mil galones, en Norte de Santander lo hicieron en 680 mil, y en Arauca adicionaron 63 mil. En ningún departamento los usuarios han consumido más del 80 por ciento disponible así que, como cada mes renuevan el cupo, proyectan que la cantidad de gasolina para suplir la demanda alcanza hasta final de mes. Además, también hay suficiente combustible al precio normal.
Sin embargo, William Villamizar, gobernador de Norte de Santander, concluye que si la demanda sigue en aumento existe un riesgo de desabastecimiento, por lo que las autoridades nacionales deben poner el foco en la prevención. Por otra parte, en el Ministerio de Minas y Energía señalan que hay estrategias en marcha para enfrentar la amenaza de escasez, como revisar periódicamente el cupo departamental disponible. La situación, más que crítica, es una alarma para el Gobierno y las entidades locales.
*Con información de AFP
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela