“Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre”, Mateo 7:7-8, fue el versículo de la Biblia que Joel Graterol trinó luego de ser convocado por Venezuela para la primera fecha de las eliminatorias al mundial.
Como todos los niños que alguna vez soñaron con ser futbolistas profesionales, Joel Graterol se siente afortunado de vestir la camiseta de Venezuela. Desde pequeño aspiraba ponerse la vinotinto. “La selección siempre fue mi mayor anhelo. Representar al país es el sueño de cualquier venezolano. Es el punto máximo de cualquier atleta profesional”, dice con orgullo.
Joel es el único jugador convocado por Venezuela de la liga colombiana. Llegó al América de Cali en diciembre de 2019 para competir por el puesto con el colombiano Eder Chaux. Con tiempo, esfuerzo y buenas actuaciones, Joel ha sabido quedarse con el arco escarlata. Ha disputado solo 7 partidos pero poco a poco se ha ganado un espacio y ha entrado en el corazón de los hinchas rojos, de los más exigentes del país.
Jugar en Colombia ha sido fácil, a pesar de estar lejos de su familia, en el país se ha sentido como en casa. “Es casi la misma cultura con la que tú creciste, la misma naturalidad con la que has vivido toda tu vida. Eso lo hace todo más fácil. Te sientes tranquilo porque compartes muchas cosas con la gente”, cuenta.
Joel nació en Valencia, el 15 de mayo de 1997. Desde muy temprano soñaba con ser futbolista, siempre quiso ser arquero. Con esa meta en su cabeza ha dedicado su vida al fútbol. Todo lo que hace está atado a un balón.
Durante su infancia su padre, William, siempre le inculcó esas ganas de ser más, de ser mejor cada día. Fue él quien lo entrenó para que fuera un buen arquero. “Sin mi padre no habríamos podido. Soy portero profesional gracias a todo su esfuerzo. Siempre me ha acompañado”, dice Joel. Los Graterol por William son una familia de arqueros, su hermano Jorge también ataja, en Carabobo FC, equipo en el que Joel debutó.
Su carrera despegó desde temprano. Fue campeón de la Liga de Venezuela con tan solo 21 años, atajando en el Zamora, y después campeón de la copa con 22. Esos logros lo llevaron al América de Cali y a ser uno de los arqueros convocados para las eliminatorias en lo que será un debut especial para su selección: el partido contra Colombia.
«El partido saca a las personas de los momentos difíciles que viven y les da una alegría, un momento de felicidad. Eso es lo que siente el venezolano, así como el colombiano, cuando juega su selección»
Joel Graterol. Futbolista venezolano
El clásico Colombia contra Venezuela ha sido uno de los partidos más importantes de la eliminatoria para los dos equipos. Con los años los países vecinos han cultivado una rivalidad en la cancha que se ve en partidos aguerridos, apretados, donde nada se deja al azar.
‘El clásico de la frontera’, como se conoce históricamente la gesta deportiva entre Colombia y Venezuela, se disputó por primera vez en 1938 en un enfrentamiento por la cuarta edición de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, en Panamá. Desde ese encuentro han jugado 41 veces, Colombia tiene 19 victorias, Venezuela 7 y han empatado en 15 ocasiones. Los jugadores de ambos equipos han dejado cada gota de sudor en el campo para que su selección gane, es un partido crucial para ambos.
Así lo siente Joel, vive el partido contra Colombia con cada fibra de su cuerpo. Siempre ha disfrutado el encuentro. Se acuerda de casi todas las disputas entre los ambos países. Los partidos con Rafael Dudamel en el arco, y sus atajadas increíbles. Los goles de Salomón Rondón, el goleador histórico de Venezuela con 30 anotaciones, quien estará ausente en este partido.
Sabe la importancia del encuentro para todos los venezolanos y colombianos que se unen detrás de sus selecciones. “El partido saca a las personas de los momentos difíciles que viven y les da una alegría, un momento de felicidad. Eso es lo que siente el venezolano, así como el colombiano, cuando juega su selección”, dice Joel.
Este partido será especial, jugará contra el país al que hoy llama hogar. Joel hace parte de los centenares de jugadores venezolanos que han encontrado en Colombia su lugar en el mundo.
Jugadores como Rafael Dudamel, quien curiosamente fue el técnico que lo hizo debutar, y atajó en cuatro grandes de Colombia; Santa Fe, Millonarios, Deportivo Cali, donde fue campeón, y América. Como Luis Manuel Seijas, que con sus goles y carisma enamoró a los hinchas de Santa Fe; Alejandro el ‘Lobito’ Guerra, el primer venezolano campeón de la Copa Libertadores, que jugó con Atlético Nacional y Wuilker Fariñez, que hasta hace poco fue arquero de Millonarios.
Este viernes, en el duelo contra Colombia, Joel será un representante de los dos países. De esa historia de jugadores venezolanos que han llenado de alegría a millones de colombianos. Un arquero con alma vinotinto, que espera formar parte de la historia del América de Cali, uno de los clubes más importante y ganadores de Colombia.
Por: Mateo Medina Abad @teomedinabad
