En la vereda Campo Alegre, de Cali, surgió una iniciativa que integró a 22 niños venezolanos y 8 colombianos. A través de la música, este grupo de niños demuestra que no hay fronteras para compartir.
“Tucusito, tucusito llévame a cortar las flores… Mira que en las Navidades se cortan de las mejores…Vuela, Vuela, llévame a cortar las flores… Vuela, vuela….”, cantan al unísono un grupo de niños migrantes venezolanos en el patio de la biblioteca de la comunidad rural Campo Alegre, ubicada al sur del río Cali, en la capital de Valle del Cauca.
La emoción no le cabe en el pecho a la niña venezolana Norkys Solórzano, quien llega al espacio a ensayar los villancicos tradicionales de las fiestas decembrinas en Venezuela. Ella, al igual que 21 niños venezolanos y ocho colombianos integran esta agrupación musical, que surgió como una bocanada de esperanza en plena pandemia por la covid-19; cuando el hacinamiento y la precariedad ahogaban los hogares de miles de colombianos y de cientos de migrantes venezolanos.
“Yo me siento muy feliz de cantar en este grupo. Cuando a veces se me olvida la letra de una canción mis compañeros me ayudan”, dice Norkys acompañada por su mamá Maryolyn Guerrero, quien sueña para su hija un futuro mejor en la ciudad de Cali, a donde llegaron en junio de 2018, después de caminar durante 22 días desde Cúcuta.
«Desde que retorné de Venezuela a Cali comencé a dar clases de guitarra a los niños y clases de ajedrez en la biblioteca del sector El Aguacatal. Poco a poco nos fuimos empoderando en el sitio para alejar los vicios en los jóvenes. A mí siempre me ha gustado la música, quedé enamorado de las canciones de aguinaldos venezolanas y por eso me emociona este proyecto de Los Tucusitos»
Rubiel Abella, retornado colombiano
Esta iniciativa de integración entre población migrante, retornada y de acogida es apoyada por el Proyecto Integra, de USAID. Indú Ocampo, directora de la organización civil Venezuela Aporta, contó al Proyecto Migración Venezuela que comenzaron realizando una feria de emprendimientos en el año 2019 en la comuna 1 de Cali; en esa oportunidad enviaron el mensaje a la comunidad receptora de que los venezolanos llegaron a Colombia a aportar soluciones en diferentes ámbitos.
“Los Tucusitos surgen en la pandemia como una estrategia de cuidado de la salud mental, los niños se estaban viendo afectados encerrados en las casas, y entonces los migrantes comenzamos a recordar la infancia en Venezuela y las canciones tradicionales en Navidad”, rememora Ocampo, a la vez que añade que Los Tucusitos fue una agrupación que creó el maestro Moisés Peña en el año 1959, en Caracas. En su honor, la comunidad migrante decidió conformar en Cali la pequeña coral Los Tucusitos, con niños nacionales y provenientes de Venezuela.
A los colibríes o picaflor se le conoce con el nombre de “tucusitos” en Venezuela. Son aves autóctonas y exclusivas del trópico americano, y ahora una metáfora de los niños migrantes que alegran las Navidades en Cali.
Por: Milagros Palomares @milapalomares