La zona fronteriza La Parada es una de las más vulnerables ante la contingencia por el covid-19 debido a la gran cantidad de personas que se concentran en este paso de Norte de Santander, que une a la población de Cúcuta con Venezuela.
En este punto se ubica el puente internacional Simón Bolívar, por donde transitaban unas 40.000 personas antes del cierre, en su mayoría migrantes pendulares y colombianos retornados.
Tras un recorrido por esta zona limítrofe, que fue militarizada el pasado miércoles, autoridades locales y departamentales solicitaron al Gobierno nacional una internvención sanitaria de La Parada, a fin de atender a sus habitantes, así como también controlar el flujo de personas que atravesaba los pasos ilegales aledaños al puente Simón Bolívar.
“Estamos haciendo un reconocimiento en una de las zonas más críticas con población migrante que requiere una atención importante, y que ante la crisis del covid-19 requiere unas condiciones que estamos valorando en este momento para apoyar desde la Gobernación a todos los municipios. Todos debemos unirnos para ayudar a La Parada, necesitamos una intervención del Gobierno nacional, ya que la vulnerabilidad de la población migrante y local es grandísima. Este recorrido institucional nos permite entender la situación crítica que hay en La Parada y actuar lo más rápido posible”, informó Víctor Bautista, secretario de fronteras del departamento Norte de Santander.
Añadió que junto con el Instituto Departamental de Salud y la Alcaldía de Villa del Rosario diseñarán un plan de atención sanitaria para llevarlo a esta región de frontera. “Nuestro sistema de salud ayudará a todos los pobladores del municipio Villa del Rosario, incluyendo a la población migrante, sin discriminación por su nacionalidad”, dijo.
En este recorrido también estuvo Eugenio Rangel, alcalde de Villa del Rosario, y el coronel del Ejército, Ever Garzon Rey, quienes coordinarán acciones sanitarias y de seguridad frente a la situación que vive esta población.
Según Rangel, la región presenta altos índices de hacinamiento como resultado de los procesos migratorios propios de la zona. La preocupación se intensifica debido a que este es uno de los principales factores de riesgo para el contagio del coronavirus.
Si bien el sector aún no presenta ningún caso confirmado de covid-19, el alcalde de Villa del Rosario se unió a la petición de una intervención por parte del Gobierno nacional en el refuerzo del sistema de salud para la emergencia sanitaria, así como un llamado a la cooperación internacional y la fuerza pública para mantener el orden.
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela