Darién: El tránsito de niños y niñas en 2023 ya superó las cifras de todo el 2022

En el departamento de La Guajira la tasa de natalidad es la más alta del país, según cifras oficiales del DANE (Colprensa - Camila Díaz)

Más de 40,000 menores han arriesgado sus vidas atravesando la peligrosa selva del Darién. 

Por Redacción MigraVenezuela

En una preocupante tendencia que ha dejado perplejas a las autoridades y organizaciones humanitarias, la primera mitad del año 2023 ha registrado un alarmante incremento en el número de niños, niñas y adolescentes que han cruzado la peligrosa selva del Darién, situada entre Colombia y Panamá. Los datos revelan que más de 40,000 menores han arriesgado sus vidas en este viaje, superando la cifra total del año anterior. 

Este cruce, a menudo mortal y plagado de dificultades, está siendo emprendido por niños y niñas, muchos de los cuales tienen menos de cinco años. La gravedad de la situación se hizo aún más evidente cuando testimonios de aquellos que se aventuraron en esta travesía llegaron a la luz pública. Los sobrevivientes compartieron historias desgarradoras de la pérdida de sus pertenencias, documentos de identidad y medios económicos durante el viaje, dejándolos con nada más que la ropa que llevaban puesta. 

En este contexto, UNICEF ha emitido un llamado urgente a la adopción de políticas migratorias más amigables para los niños y niñas en la región. Es imperativo brindar respuestas humanitarias sólidas y específicas para cada edad, incluyendo servicios de salud y protección infantil, a lo largo de las rutas migratorias. 

“La mitad de estos niños y niñas en movimiento tienen menos de cinco años y tienen necesidades específicas. Conocí a algunos de ellos y a sus padres cuando fui a la selva del Darién hace unas semanas. La mayoría de estas familias migrantes han perdido todo durante la travesía: sus pertenencias, sus documentos de identidad, su dinero; se quedan sin nada más que la ropa que llevan puesta. Fue desgarrador escuchar las historias de penurias de estos sobrevivientes”, expresó Garry Conille, Director Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe 

En respuesta a esta crisis, organizaciones internacionales han estado trabajando en colaboración con aliados locales a lo largo de las rutas migratorias. En Colombia, donde los niños y niñas se dirigen al Darién, se han implementado medidas para proporcionar agua potable, suministros de higiene y servicios de protección. Esto incluye la identificación de niños, niñas y adolescentes no acompañados y separados, así como la educación de las familias sobre los riesgos asociados con la travesía. 

En Panamá, punto de salida del peligroso trayecto a través del Darién, organizaciones de atención humanitaria han intensificado su presencia para brindar servicios esenciales como agua, saneamiento, espacios seguros para mujeres y adolescentes, y apoyo psicosocial y protección infantil. Estas medidas se están implementando a través de espacios amigables para la infancia, tanto para los niños y niñas migrantes como para las comunidades de acogida. 

En vista de la dinámica en constante evolución de la situación migratoria en la región, se hace evidente la necesidad de una respuesta integral, transfronteriza y multidireccional que ponga en primer plano el interés superior del niño. Independientemente de las circunstancias que llevaron a estos niños y niñas a abandonar sus hogares, es fundamental que estén protegidos en todo momento.

Como resultado de la crisis migratoria en Venezuela, se estima que 1,1 millones de niños y niñas –entre ellos los que han salido del país, así como los que regresan a sus países de origen y los que viven en comunidades de acogida y de tránsito– necesitarán protección y acceso a los servicios básicos en toda la región de América Latina y el Caribe en 2019.