Solo el 26,3 por ciento de los casi tres millones de migrantes venezolanos en Colombia tiene acceso a productos financieros.

Angélica Antía Azuaje –Periodista de Te Lo Cuento News

La alianza entre la Caja de Compensación Familiar de la Federación Nacional de Comerciantes  (Comfenalco – seccional Antioquia) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), a través de la estrategia “Juntos por la inclusión”, han logrado ofrecer capacitaciones y talleres de educación financiera a migrantes y refugiados en el departamento de Antioquia.

Lina Noreña, coordinadora de la estrategia “Juntos por la inclusión” explica que estas capacitaciones brindan las herramientas necesarias para que esta población específica entienda cómo funciona el sistema financiero y cómo pueden acceder a los servicios que este ofrece.

Asimismo, se han establecido convenios y acercamientos con entidades bancarias para generar mayor confianza y facilitar el acceso a productos y servicios financieros.

Destaca que de los casi 3 millones de migrantes y refugiados que hay en Colombia, solo el 26,3% tiene acceso a productos del sector financiero.  La falta de documentos que avalen su historial crediticio y experiencia laboral son las principales barreras para que esta población pueda acceder a la banca.

“El proyecto Juntos por la inclusión de Comfenalco Antioquia y ACNUR aporta a la solución de esta problemática con acciones de educación financiera y acercamiento a entidades bancarias”, resalta Lina. 

Agrega que ha sido fundamental en la inserción económica de los migrantes y refugiados en Antioquia. Gracias a estas acciones, se ha logrado que un mayor porcentaje de esta población tenga acceso a servicios financieros, lo que se traduce en una mejora en su calidad de vida y mayores oportunidades de desarrollo.

De hecho, a mediados de septiembre, en la capital antioqueña se definieron cuatro fases de trabajo: mapeo de entidades, programas y servicios de inclusión; espacios de sensibilización y capacitación con actores claves del sistema financiero colombiano; conexión de la oferta de microcréditos de instituciones financieras con la demanda de la población refugiada y migrante; así como actualización y difusión de la Guía de Inclusión Financiera. 

En Medellín se creó la Mesa de Integración Socioeconómica y Cultural de Antioquia, con representantes del Grupo Interagencial sobre Flujos Migratorios Mixtos, GIFMM y las instituciones que lo conforman, entre ellas, la Organización Internacional para las Migraciones OIM, Mercy Corps y la Corporación Ayuda Humanitaria, que trabajan para beneficiar a los más de 238.400 migrantes y refugiados que se encuentran en la ciudad, según datos de Migración Colombia, 2022. 

Lo que deben saber los migrantes y refugiados

“Actualmente, la población refugiada que se está reportando en Colombia es prácticamente el equivalente a la ciudad de Medellín. Eso es una tendencia muy alta y esas dimensiones generan impactos en las dinámicas de desarrollo en los territorios. Por ello, urge atenderla. Nuestra fundación lo que hace es convocar a distintos actores para que efectivamente trabajemos de forma muy clara y contundente para brindar asistencia”, dice Lina.

A juicio de Lina, el acceso a servicios financieros les permite, en primer lugar, mejorar su calidad de vida, pues los ayudan a cubrir sus necesidades básicas, como el alojamiento, la alimentación y la salud.

En segundo lugar, a ampliar sus oportunidades de empleo, ya que el acceso a créditos y microcréditos puede favorecer a los migrantes y refugiados a iniciar o ampliar sus negocios.

Y el tercer término, les permite integrarse en la sociedad, lo que supone el establecimiento de relaciones con la comunidad y a participar en la economía local.

Los retos 

Lina explica que las personas migrantes y refugiadas pueden enfrentar barreras para acceder a servicios financieros, como la falta de documentación, pues los migrantes y refugiados pueden tener dificultades para obtener credenciales necesarias para abrir una cuenta bancaria o solicitar un préstamo.

Otro inconveniente sería la falta de conocimiento, ya que los migrantes y refugiados pueden no estar familiarizados con el sistema financiero y los productos y servicios que ofrece. Y por último, la discriminación podría darse con los bancos y otras instituciones financieras.

Matizó que la alianza entre Comfenalco Antioquia y ACNUR está trabajando para superar estos retos y garantizar que las personas migrantes y refugiadas en Antioquia tengan acceso a servicios financieros inclusivos.

Entre los proyectos a corto plazo está el fortalecimiento y actualización de la guía de orientación financiera para la población refugiada migrante proveniente de Venezuela, hacer el mapeo de actores y generación de alianzas con entidades del sector financiero como bancos y cooperativas, así como complementar los procesos formativos de empleo y autoempleo como parte de la educación financiera. 

“La inclusión financiera es un derecho humano fundamental para todas las personas, independientemente de su origen o condición migratoria. La alianza entre Comfenalco Antioquia y ACNUR es un ejemplo de cómo las organizaciones pueden trabajar juntas para promover la inclusión financiera de las personas migrantes y refugiadas”, concluye.