Una pareja de venezolanos, tras superar vicisitudes, ahora ofrece con éxito la comida japonesa en el departamento del Meta, Colombia.
Por: Luis Molina, periodista de Te lo Cuento News
David Araque y Laura Fernández, una pareja de merideños venezolanos, con la experiencia desarrollada durante años en el Sushi Rock Bar y Madajo Resto Bar, de Mérida, trajeron a Colombia un emprendimiento denominado Natsuki Sushi Bar, que comenzó en El Chorro de Quevedo en Bogotá y ya cuenta con sucursales en Villavicencio, Acacías y ahora Granada, en el departamento de El Meta.
David Araque comentó que por la situación que se estaba viviendo en Venezuela, tuvo que cerrar su emprendimiento porque no era rentable, aunado a las complicaciones para conseguir los insumos, la gasolina y la situación política del país, decidiendo con su familia venirse a Colombia y comenzar de cero, “nos vinimos en el 2018 y comenzamos en El Chorro de Quevedo de Bogotá, zona de afluencia turística en el centro de la capital de Colombia.
“Logramos montar un emprendimiento, un negocio de sushi, denominado Garden Drinks, y por no saber el tema de leyes en Colombia, el 4 de enero de 2019, nos pusieron un sello definitivo o cierre total, por lo que perdimos esa inversión y nos tocó salir a trabajar como empleados y empezar de nuevo”.
El 9 de diciembre del 2019 reabrieron en Bogotá, luego que vendieron algunas propiedades en Venezuela, donde estuvieron trabajando hasta marzo de 2020, ya que les tocó de nuevo cerrar al público de manera presencial por el tema de la pandemia. Pero no se amilanaron y pudieron sostener el negocio y no cerrarlo a través de domicilios con la plataforma de rappi, y así sobrevivir.
Formaron una cartera de clientes que degustaron los productos japoneses en sus casas y pudieron sobrellevar la situación y también porque el arrendatario llegó a un acuerdo de pago y así evitaron el cierre del negocio.
Sortearon la pandemia y establecieron en Bogotá el restaurante de comida japonesa donde ofrecen fundamentalmente sushi y una carta bien variada con el plato del ramen, sopa japonesa que conquistó los paladares de los bogotanos.
En 2022 abrieron 2 sucursales en Acacía y Villavicencio del Meta y en este año 2023 están por abrir un restaurante en Granada, también en el departamento del Meta, zona llanera colombiana.
Por su parte, Laura Fernández, retornada de Venezuela, da gracias a Dios porque han estado bien en Colombia, han podido salir adelante, y ahora todos los negocios están de forma regular y a su nombre, por poseer cédula de ciudadanía, ya que con el Permiso Especial de Permanencia (PEP) de su esposo era complicado poder registrar los emprendimientos.
Aquí en Bogotá concibieron un bebé, y ha sido tan exitoso el crecimiento del restaurante en los últimos años, que en octubre acaban de participar en el Sushi Master, donde tuvieron una buena participación.