El nuevo Jefe de Estado es un hombre políticamente de izquierda, y que anunció que una de sus prioridades es restablecer plenamente las relaciones con el régimen de Nicolás Maduro. Ya hizo sus primeros anuncios públicos sobre la migración venezolana.
Gustavo Francisco Petro Urrego nació en Ciénaga de Oro, Córdoba, el 19 de abril de 1960 y desde muy joven se vinculó a la actividad política en Zipaquirá, Cundinamarca.
En 1977 se unió el entonces grupo guerrillero M-19, con el cual estuvo muy activo hasta que se produjo la negociación de paz con el Gobierno del entonces presidente Virgilio Barco, que terminó con la dejación de las armas.
Comenzó su carrera política, primero como Representante a la Cámara en 1991, aspirando por la AD-M19, el partido político que surgió de los acuerdos de paz, y luego sometiendo sin éxito su nombre a consideración para la Alcaldía de Bogotá en 1997.
Finalmente fue escogido Senador con la mayor votación en 2006, y luego fue Alcalde de la capital de la república entre 2012 y 2015. Más tarde se lanzaría como candidato presidencial en dos ocasiones, en las que vencieron Juan Manuel Santos e Iván Duque.
Desde el 7 de agosto se convirtió en el nuevo inquilino de la Casa de Nariño; economista de profesión, Petro ha sido uno de los políticos más activos de Colombia durante los últimos 15 años.
Aunque en campaña no se refirió públicamente al tema de la llegada de personas venezolanas a Colombia, este nieto de un migrante italiano, ya tomó cuatro decisiones que involucran a quienes llegaron desde el vecino país.
La primera de ellas fue el anuncio de que restablecerá plenamente relaciones diplomáticas con Venezuela, rotas desde 2015, con motivo de la expulsión de centenares de colombianos por parte del régimen de Nicolás Maduro.
La segunda es la reapertura de la frontera entre los dos países, lo que significa, por un lado, la reactivación socioeconómica, especialmente en Cúcuta, y, por otro, todo un reto logístico, comercial y migratorio para las autoridades, que tendrán que llegar a acuerdos binacionales. estratégicos, consensuados y sostenibles.
La tercera, anunciada por Daniel Rojas, uno de sus alfiles, fue la implementación de un plan de retorno voluntario para las personas venezolanas que quieran volver; aunque no se conocen los detalles, los expertos coinciden en que es un anuncio prematuro y poco viable en el futuro cercano.
Y la cuarta, y más importante, es el anuncio de que mantendrá el Estatuto de Protección Temporal a Venezolanos, implementado durante el Gobierno Duque, y que les garantiza la regularización por 10 años y pleno acceso a la oferta estatal de servicios. Además le confirmó a la cooperación internacional su intención de seguir trabajando conjuntamente.
Se espera que durante los próximos días el presidente Petro anuncie quién estará a cargo de la Gerencia de Fronteras, y de Migración Colombia, las dos entidades clave en el apalancamiento de la consolidación de la integración de las personas venezolanas.
Por: Mario Villalobos @maritovillalobo