Este lunes, la Guardia Nacional Bolivariana abrió un corredor fronterizo y permitió el paso de estudiantes y personas enfermas por los puentes internacionales Francisco de Paula Santander y Simón Bolívar. Más de 4.000 niños de San Antonio y Ureña estudian en colegios colombianos.
Desde el pasado 23 de febrero, cuando Nicolás Maduro rompió relaciones diplomáticas con Colombia y dio la orden de cerrar los pasos fronterizos, miles de niños y pacientes venezolanos no pudieron cruzar la frontera para recibir educación y atención médica o se vieron obligados a cruzar a través de las trochas. En los últimos días la tensión aumentó con la instalación de contenedores cargados para impedir el paso por los puentes.
Luego de 17 días del cierre de la frontera por parte de Venezuela, de 5 mil ciudadanos venezolanos lograron ingresar nuevamente al territorio colombiano, luego de que la Guardia Nacional Bolivariana habilitara un paso temporal por los Puentes Internacionales Francisco de Paula Santander, La Unión y Simón Bolívar.
Según el balance de Migración Colombia, la medida permitió que más de 3 mil 300 menores venezolanos regresarán a clases y un poco más de mil 800 adultos pudieran ingresar a Colombia para recibir asistencia médica.
“Celebramos la decisión de Venezuela de permitir el día de hoy el paso hacia Colombia de más de 3 mil menores de edad que viven allá, pero que estudian en nuestro país y que, en muchos casos, reciben aquí los únicos alimentos que comen durante el día. Esperamos que esta decisión se mantenga en los próximos días y que la dictadura de Nicolás Maduro entienda que el cierre de la frontera lo único que genera es ilegalidad”, dijo el Director General de Migración Colombia, Christian Krüger Sarmiento.
Por: Proyecto Migración Venezuela @MigraVenezuela