Cuando el Dane publicó el informe de mercado laboral de 2018, la información recolectada reveló que la tasa de desempleo había pasado de 8,4 % en noviembre de 2017 a 8,8 % en el mismo mes de 2018. Aunque era un incremento leve, para muchos la noticia fue desalentadora. El descontentó aumentó cuando algunos medios publicaron que durante ese mismo periodo el desempleo entre los migrantes disminuyó.
La conclusión inmediata al relacionar estos datos es que los venezolanos le están quitando el trabajo a los colombianos, pero el tema requiere un análisis más profundo. Rápidamente el mito de que “los venezolanos nos quitan los empleos” hizo carrera y se popularizó cada vez que aparecían los nuevos reportes del DANE.
Cinco meses después, el director del DANE, Juan Daniel Oviedo, dijo públicamente que “no podemos decir que los migrantes con puesto laboral deterioren la estructura de la ocupación en Colombia”.
¿Qué dice el Dane?
Según el informe más reciente, a marzo de 2019, en Colombia hay 2’682.000 colombianos desocupados, un 16,7 por ciento más que los registrados hace un año.
Oviedo también dijo que “la migración venezolana es un hecho que tenemos que reconocer”, y agregó que en el mercado laboral 345.000 migrantes venezolanos están ocupados. “Esa ocupación está no solo en empleos vulnerables, sino de calidad”, afirmó.
Daniel Gómez trabajaba en una central azucarera en Venezuela. Cuando llegó a Colombia consiguió trabajo en un restaurante y luego en un taller donde nunca le pagaron por su trabajo. Después de tocar las puertas de otros negocios, logró conseguir el puesto en el que está hoy como mecánico para carros diesel. ©Miguel Galezzo l Proyecto Migración Venezuela
Sobre la metodología
Según la teoría económica, los migrantes pueden ser sustitutos de los trabajadores no calificados y pueden ser complementarios de los calificados. En otras palabras, como los migrantes con niveles educativos más altos están dispuestos a trabajar por menos salario, son más atractivos para algunos empleadores en aquellos trabajos que puede realizar una persona sin tener un título profesional.
Pero la migración desde Venezuela es un fenómeno desconocido para un país como Colombia. Por eso, Luz Karime Abadía señala que“hay pocas mediciones y no hay datos precisos que permitan hacer el análisis riguroso”.
Así que a pesar de que parte del aumento del número de desempleados sí se puede explicar por la llegada de más de un millón de venezolanos al país, aún no se han realizado estudios que permitan demostrar esa relación.
Luis Alberto Torres pasa sus días en un taller en la localidad de Kennedy, en Bogotá. “Yo no me vine aquí a pasear, a pasarla rico, Yo me vine porque realmente allá las cosas son insoportables”, dice Luis. ©Miguel Galezzo | Proyecto Migración Venezuela
El informe sobre el mercado laboral del Dane proviene de la Gran Encuesta Integrada de Hogares (GEIH). En esta medición, el Dane toma por migrantes venezolanos a todas aquellas personas que vivían hace doce meses en Venezuela. Con esta metodología, es posible que se esté incluyendo población colombiana retornada y, así mismo, que se excluya a los venezolanos que llegaron hace más de un año al país.
En el más reciente informe contabilizó 723.000 personas que hace un año vivían en Venezuela. De ellos, el 85 por ciento, es decir, 615.000, no está afiliado a ningún régimen de salud. En cuanto al mercado laboral, 341.000 están ocupados.
Para Juan Carlos Guataqui Roa, ex subdirector del Dane y profesor del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, afirmar que el desempleo disminuyó en los migrantes es arriesgado y no es riguroso metodológicamente, porque no se sabe si los migrantes provenientes de Venezuela encuestados en noviembre de 2017 son los mismos de 2018. Pero además, es peligroso porque “a la luz del incremento del desempleo, la lectura conjunta es que los migrantes están desplazando laboralmente a los colombianos. Y esto no es necesariamente así”.
Desde enero Proyecto Migración Venezuela le puso el ojo a este tema y consultamos con varios expertos en mercado laboral. Esto fue lo que nos explicaron:
“El aumento no es significativo”
“El incremento no es estadísticamente significativo, es decir, es una variación pequeña” dice la economista Luz Karime Abadía, experta economía laboral de la Pontificia Universidad Javeriana. Un cambio que se explica, según el informe, porque cada vez se están demandando menos trabajadores en el sector agrícola y en el sector servicios.
Lo mismo aclaró el director del Dane cuando afirmó que “solo se observó matemáticamente en noviembre de 2018 un incremento de 0,4 puntos porcentuales, eso no es una diferencia significativa. Por lo tanto, la entidad no puede afirmar que subió o bajó el desempleo”.
Pero además de ser pequeña, la variación que mostró el primer informe de este año no es exclusiva de 2018. Es decir, el número de desempleados en Colombia sí ha aumentado en los últimos años. Para Daniel Francisco Escobar, director de investigaciones económicas de Global Securities, este incremento se debe a que la economía ha crecido cuatro años consecutivos por debajo de su nivel potencial. “Esto en términos prácticos indica que la nueva mano de obra no está siendo absorbida por el aparato productivo”.
«No es un fenómeno nuevo, es la consecuencia de un fenómeno estructural, y no de un tema específico como los migrantes»
Daniel Franciso Escobar
director investigaciones económicas de Global Securities
Qué explica el aumento
Aunque los académicos consultados sí identifican la llegada de los migrantes como una variable que hay que tener en cuenta para analizar los cambios en el mercado laboral, lo cierto es que no es la única. Según el experto en mercado laboral, Pablo Adrian Garlati, el aumento del número de desempleados puede ser el reflejo de la adaptación de la economía a un nivel mucho más bajo del precio del petróleo. Pero también “al ajuste de expectativas del mercado al nuevo gobierno del presidente Duque, con la reforma tributaria del año pasado”.
Para analizar este aumento, los expertos señalan que hay que tener en cuenta que hay ciertos sectores de la economía nacional -como el comercio, hoteles y restaurantes- en los que hay más participación laboral, pero que también son altamente informales e inestables laboralmente. Por eso, aunque son importantes generadores de empleo, con gran facilidad también pueden disminuir un gran número de ocupados y contribuir al aumento del desempleo.
«Esta relación no ha sido medida hasta ahora en Colombia y no hay trabajos que confirmen o rechacen esta hipótesis»
Luz Karime Abadía
Experta en economía laboral de la pontificia universidad javeriana
Esto, sin tener en cuenta que el comportamiento del mercado laboral es cíclico. Las temporadas altas, como diciembre y enero, son los meses de mayor empleo, mientras que durante meses de más calma, como septiembre, la desocupación aumenta.
Por: Juliana Peña @Julianapg
