Gracias al trabajo conjunto del Ministerio de Educación, la Gerencia de Fronteras y USAID, un grupo de jóvenes y adolescentes venezolanos, que había adelantado sus estudios entre 2018 y 2021, podrá celebrar su primer gran logro académico.

La inclusión de cerca de 550 mil niños, niñas y adolescentes venezolanos al sistema educativo implicó un reto de proporciones gigantescas para las entidades regionales, locales y municipales, pero hoy comienza a ver sus frutos.

El programa “Juntos nos graduamos” les entregará al primer grupo de jóvenes venezolanos su título académico como bachilleres luego de definir su situación migratoria, es decir, tras obtener su Permiso por Protección Temporal (PPT), que fue posible gracias a las garantías que brinda el Estatuto Temporal de Protección a Venezolanos (ETPV).

La ceremonia será este 28 de julio, en el Parque Explora de Medellín, donde los nuevos y orgullosos bachilleres celebrarán no solo la consolidación del primer y gran logro personal en su formación, sino, adicionalmente, la posibilidad de abrir la puerta hacia su formación superior en una universidad o en un centro de estudios tecnológicos. 

Para quienes han respaldado este proceso se trata de un hito porque es la consolidación de un trabajo incansable, que se traduce en oportunidades de vida para quienes son los llamados a convertirse en una fuerza de progreso para la comunidad migrante y para quienes los acogen en su territorio.

«Es la manera de ofrecerles a los niños y las niñas, que habían culminado sus estudios de bachillerato, la posibilidad de avanzar realmente en su integración socioeconómica»

Lucas Gómez, gerente de Fronteras

El programa “Juntos nos graduamos” es la puerta de entrada no solamente para obtener el pasaporte para el ingreso a las universidades sino que sigue trabajando sin descanso para que las personas venezolanas comprendan en toda su dimensión el mundo de oportunidades que implica para los jóvenes el hecho de integrarse desde lo académico.

Por eso hace un llamado a todos los muchachos para que se regularicen cuanto antes porque, en la medida en que tengan definida su situación migratoria, podrán acceder no solo a estudio sino a diversas oportunidades de emprendimiento y empleabilidad.

Por: Mario Villalobos @maritovillalobo