El Ministerio de Salud y Protección Social entregó detalles de cómo está atendiendo a las personas venezolanas, sobre la base de información precisa que permite identificar cuáles son los aspectos a priorizar.
Desde diciembre de 2020, la entidad viene tomándole el pulso a la salud de los migrantes, a través del denominado Observatorio de Migración en salud, una herramienta que provee datos confiables para tomar decisiones puntuales sobre la atención en salud a esa comunidad.
“Tenemos una vigilancia constante de datos en cuanto a aseguramiento, financiamiento y prestación de servicios de salud para la población”, asegura María Andrea Godoy, viceministra de Protección Social.
Con toda esa información resulta más sencillo atender y priorizar a quienes más lo necesitan, en coordinación con las EPS y los operadores locales de salud.
“Podemos caracterizar la población, determinar si está teniendo acceso a la salud, ver cuál es su situación de salud, tener temas específicos para alimentar las políticas públicas y con ello seguir avanzando en el cubrimiento de las necesidades”, explica la funcionaria
Las cifras oficiales revelan que el sistema de salud colombiano ha prestado 18.847.507 atenciones en salud, que corresponden a 2.227.287 personas venezolanas, es decir, en promedio cada ciudadano ha recibido 8,47 atenciones individuales.
De todas las personas atendidas 1.441.784 son mujeres venezolanas migrantes que recibieron atención en salud por parte del Estado colombiano, y de ellas 387.124 fueron gestantes que recibieron todos los cuidados necesarios; las cifras oficiales indican que se registró nacimiento de 149.077 niños.
“Aquí hay una protección adicional porque el niño cuando nace queda afiliado automáticamente al Sistema General de Seguridad Social en Salud, y tiene todo el cubrimiento integral de las necesidades en salud”, acota la viceministra Godoy.
En total, según el Ministerio de Salud y Protección Social, se atendieron 786.003 hombres. Entre 2018 y 2022 se han destinado 791.171 millones de pesos para el aseguramiento de la población migrante venezolana, en especial con financiamiento del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, durante los años 2020 y 2021.
“Nuestro gran reto es la población irregular y la población pendular que muchas viene para obtener la atención en salud; para eso necesitamos hacer esfuerzos mucho más grandes”, enfatiza la funcionaria.
Por: Mario Villalobos @maritovillalobo
